Recientemente, tuvimos la oportunidad de reunirnos con nuestros socios implementadores para reflexionar sobre la calidad de los programas que hemos estado llevando a cabo en Ecuador.
Este encuentro fue fundamental para evaluar los resultados de los últimos cinco años y para trabajar en la planificación operativa anual, con un enfoque estratégico hacia nuestro ambicioso objetivo de alcanzar a 100 millones de niñas y niños para el año 2030.
Durante la reunión, realizamos una exhaustiva evaluación de los resultados obtenidos en los últimos años. Analizamos detalladamente los logros y desafíos que hemos enfrentado, con el objetivo de identificar las mejores prácticas y áreas de mejora. Este ejercicio de evaluación es esencial para garantizar que nuestros programas sigan siendo relevantes y eficaces, ajustándose a las necesidades cambiantes de las comunidades con las cuales trabajamos.
Como parte de este espacio, también dedicamos tiempo a analizar y establecer estrategias específicas para alcanzar nuestra meta global de llegar a 100 millones de niñas y niños para el año 2030. Discutimos enfoques innovadores y sostenibles que nos permitan escalar nuestros programas y aumentar significativamente nuestro impacto.
Este encuentro representa un paso importante hacia la mejora continua de los programas que desarrollamos en Ecuador. Al reflexionar sobre nuestros logros y aprender de los desafíos, estamos mejor equipados para diseñar e implementar estrategias que realmente marquen una diferencia en la vida de los niños, niñas y adolescentes, y que nos acerquen a nuestro objetivo.
Este proceso de evaluación y planificación no solo fortalece la calidad de los programas actuales, sino que también sienta las bases para un futuro más prometedor, donde cada niña y niño pueda tener la oportunidad de crecer en un entorno seguro, saludable y educativo.
En ChildFund y junto a nuestros socios, reafirmamos así nuestro compromiso con la infancia, niñez y adolescencia en Ecuador, trabajando incansablemente para construir un mejor mañana.